Las brassicas varían mucho en sus hábitos de crecimiento y desarrollo. Como resultado de eso hay grandes diferencias en los requerimientos de nutrición entre los diferentes tipos de brassicas para poder producir una unidad de producto, la relación de nutrientes absorbidos por la planta, y la cantidad removida del campo al cosechar.
Como ejemplo, cosechando brócoli solo remueve 20% del peso fresco total del cultivo. En la misma manera, lo cosechado de Col de Bruselas constituye menos de 30% del peso total del cultivo. No obstante, en repollo y colinabo se remueve de 50 hasta 70% de la planta al cosechar.
Las brassicas pueden absorber mucha nutrición. Por ejemplo, brócoli usa más de 3 kg/ha/día de N, K y Ca con el pico de absorción al inicio del desarrollo de la cabeza.
El nitrógeno se requiere en grandes cantidades y ayuda en maximizar el desarrollo y el rendimiento. La necesidad más fuerte es durante la producción foliar más intensiva. Los requerimientos totales de nitrógeno varían de acuerdo con el tipo de brassica y oscila entre 1.6 kg/t y 4.7 kg/t de producto.
Fósforo es necesario en las plantas jóvenes para asegurar un buen desarrollo de las raíces, fomentar el establecimiento, y durante todo el desarrollo vegetativo. Las brassicas usan aproximadamente 0.33 a 0.67 kg P/t de materia fresca total.
Existe una demanda grande de potasio, a veces por encima de la de nitrógeno. La cantidad total requerida, dependiendo de la variedad de brassica, está entre 2.7 y 5.1 kg/t de materia fresca. Cantidades significantes se remueven con la cosecha en cultivos como el repollo.
El cuarto macronutriente más importante es el calcio. También se requiere en cantidades relativamente grandes alrededor de 2.2 kg/t en brócoli y hasa 2.4 kg/t en repollo. La absorción pico es al comenzar la formación de la cabeza. Mientras la mayoría del calcio se utiliza para la producción de hojas, la cantidad relativamente pequeña que se encuentra en la cosecha, las cabezas, botones y hojas, ayuda en mejorar la calidad del producto y su vida en el almacén.
Magnesio se requiere en cantidades más pequeñas que en otros cultivos y la remoción está entre 0.1 y 0,3 kg/t dependiendo del tipo de brassica.
Los micronutrientes que se requieren en más cantidad en brassicas son: hierro, boro, zinc y manganeso.
Es importante analizar suelo y tejido para evaluar desequilibrios. Con equilibrios correctos se sacará lo máximo de las plantas en producción y calidad. Es particularmente importante hacerlo con cationes. Donde exista exceso de potasio, magnesio o calcio, la absorción se reduce de otros cationes.